Hoy me gustaría hablar de una problemática que afecta a muchas personas en la actualidad. Esta semana no he dejado de escuchar como los pequeños comercios están cerrando (algunos con la intención de que, cuando la situación mejore, puedan reabrir y otros, por desgracia, cerrarán definitivamente).

La historia del pequeño comercio, la tienda de barrio de toda la vida, es muy antigua y, por eso, merece la pena conservarla, cuidarla y, me atrevería a decir, mimarla. Pero a veces, por circunstancias muy diversas, o incluso, obligados por la situación actual de incertidumbre y crisis, los arduos esfuerzos de los años y quizá durante varias generaciones se vean truncados de la noche a la mañana. Por eso, me he puesto a pensar mucho en esto.

El pequeño comercio, el comercio local de toda la vida, está desapareciendo debido principalmente a dos grandes competencias:

  • Las grandes superficies que les hacen una competencia brutal en cuanto a precio y variedad en sus servicios.
  • El comercio online, e-commerce, comercio electrónico, o como queráis llamarlo, vamos el comercio que se realiza en internet.

Es verdad que la supervivencia del pequeño comercio está cada vez más amenazada pero no por ello hay que rendirse. Existen multitud de soluciones sencillas que se podrían implementar sin un coste elevado y que podrían reportar muchos beneficios a estos pequeños comerciantes sin abandonar su labor de años, décadas e incluso, siglos que les hace únicos y especiales. Muchos ni siquiera se lo plantean porque las nuevas tecnologías no están hechas para ellos o piensan que les va a complicar mucho la vida para obtener pocos resultados. Pero podría no ser así. Todo depende de nuestra actitud.

A lo largo de la historia, la humanidad se ha visto abocada a hacer cambios que han costado más o menos esfuerzo pero que al final llegan a formar parte de nuestra rutina. Así que, ahora nos toca hacer nuevos cambios para adaptar nuestros negocios, nuestras tiendas de toda la vida a la nueva sociedad del siglo XXI pero guardando la esencia de nuestro comercio local.

CÓMO DIGITALIZAR NUESTRO NEGOCIO

Siempre que se habla de digitalizar un negocio, y sobre todo, si es un pequeño comercio local, llueven las ideas bienintencionadas de nuestros allegados y con ellas las grandes interrogantes de qué hacer y cómo empezar.

Hay tres pasos muy sencillo que ya conoces en su “versión presencial”, es decir, ya lo estás haciendo a los clientes que entran en tu tienda (comunicar, enseñar y ayudar o aconsejar). Veamos cómo hacerlo.

  1. Comunica con tus clientes. Utiliza todos los medios a tu alcance (móvil, tablet, ordenador) para mantener el contacto con ellos. Se pueden mencionar todas las ofertas temporales que se tengan en ese momento y por tiempo limitado con una landing page, un sms por las redes sociales como facebook o instagram, etc…. Piénsalo: todo el mundo tiene su móvil y lo consulta a diario pero no todos tus clientes pasan por delante de tu negocio todos los días.
  2. Enseña a tus clientes lo que todavía no saben. Muchas veces, se consulta en internet antes de hacer una compra o quizá haya asuntos que no conozcan en profundidad. Ese el momento para ayudarlos y orientarles, exactamente como se haría en una tienda física. Puedes tener un blog en el que enseñar a tus clientes por ejemplo, el color de moda para la próxima temporada o las tendencias en peinados veraniegos, por ejemplo. Si aportas valor o enseñas cada vez algo a tus clientes, su fidelidad está asegurada.
  3. Ayuda a tus clientes a ahorrar tiempo. Hoy en día todo el mundo corre de un lado a otro, no se tiene tiempo de nada. Quizá trabajamos y nuestros horarios no coinciden con los de nuestra pastelería preferida que desde niños nos prepara esas tartas tan especiales, o entre el trabajo, los niños, etc. .. no podemos pasarnos por nuestra tienda de decoración tanto como nos gustaría. Así que poder comprar online es una de las soluciones a las que recurren las personas ocupadas.

FORMAS DE LLEGAR A TUS CLIENTES DE MANERA ELECTRÓNICA

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Hay muchas y diferentes acciones que se pueden hacer y que no tienen que ser costosas pero que te ayudarán a fidelizar a tus clientes de toda la vida, a ganar a otros y, además, si tuviéramos que vivir situaciones difíciles como un nuevo confinamiento, conseguiríamos mantener nuestros negocios “abiertos” para todos y, seguro, que los clientes de toda la vida estaremos encantados de continuar comprando. Un buen uso de las redes sociales es un factor primordial, así como un espacio propio para tu negocio en la red. Para muchos, todo esto es un desafío inmenso ya que conceptos como redes sociales, comercio online, facebook, páginas web, landing page o e-commerce son totalmente desconocidos. Pero no hay que preocuparse ya que hay empresas que se dedican a facilitar la tarea a aquellos que lo necesitan. Ya he mencionado en alguna ocasión a la empresa Ingeheris. Esta pequeña empresa familiar está encantada de ayudar a los comercios locales que le soliciten sus servicios con soluciones a medida según las necesidades del clientes. ¡Seguro que será coser y cantar!